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El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán, Nasser Kanaani, dijo que “la sangre de Haneyya será en vano” y agregó que su “martirio en Teherán fortalecerá y profundizará los estrechos lazos de Teherán con Palestina y la resistencia”.
Mientras tanto, el Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán celebró por la mañana una reunión de emergencia en la residencia del líder supremo, el ayatolá Ali Jamenei, en presencia de altos comandantes de la Guardia Revolucionaria para discutir el ataque que mató a Haneyya y decidir la respuesta apropiada a la operación de asesinato en Teherán.
Por su parte, el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso condenó el asesinato de Haneyya como un "asesinato político absolutamente inaceptable".
“Este es un asesinato político absolutamente inaceptable y conducirá a una mayor escalada de tensiones”, dijo el viceministro de Asuntos Exteriores, Mijail Bogdanov, citado por la agencia estatal de noticias RIA.
Bogdanov advirtió que este incidente de asesinato también tendría un impacto negativo en las negociaciones del alto el fuego en Gaza.
Turquía también condenó el “atroz” asesinato del líder de Hamás, Ismail Haneyya, en Irán.
“Este asesinato tiene como objetivo extender la guerra en Gaza a nivel regional”, advirtió el ministro de Asuntos Exteriores de Turquía. “A menos que la comunidad internacional actúe para detener a Israel, nuestra región se enfrentará a conflictos mucho mayores”.
Por su parte, el grupo Ansarullah de Yemen lamentó la muerte de Haneyya y describió su asesinato como un “crimen terrorista atroz” y una “flagrante violación del derecho internacional”.
El movimiento Hamás anunció el miércoles temprano que su líder político Ismail Haneyya fue asesinado en un ataque aéreo israelí en su residencia en la capital iraní, Teherán.
La televisión estatal iraní también informó sobre el martirio de Haneyya, señalando que se está llevando a cabo una investigación sobre el asesinato y que los resultados se anunciarán pronto.
